Un año de oportunidades para la industria colombiana

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Cuando la industria parecía caer en un letargo permanente, una bocanada exigua se escuchó en el tercer trimestre de 2015, abriendo una brecha de optimismo entre industriales y expertos, que califican al 2016 como el momento ideal para que el aparato productivo empiece a recuperar el protagonismo que gozaba hace décadas en la economía nacional.

Y es que las cifras que registró la industria a inicios de 2015 cubrieron con un manto gris hasta al más optimista, convirtiéndose en el sector económico con peor desempeño durante el primer trimestre, siendo el único con una variación negativa de -1,8%, la cual continuó en el trimestre siguiente, registrando una contracción de -0.7%, concluyendo este periodo con un dinamismo muy por debajo del promedio nacional.

Lo anterior responde en parte, según expertos, al cese de actividades de la planta de Refinería de Cartagena, ya que el sector de refinación de petróleo, mezcla de combustibles y coquización mostró, entre enero a octubre de 2015, una contracción de -6,2% en comparación con el mismo periodo del año anterior, una cifra que tiene un gran impacto, teniendo en cuenta que éste representa un 16% del total de la industria.

A esto se le debe sumar el bajo desempeñó que presentaron los subsectores de textiles y fabricación de equipo de transporte, que registraron decrecimientos de 9,5% y 6,0%, respectivamente. Además de la estrepitosa caída en las exportaciones, la cuales a octubre de 2015, según cifras reportadas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane), disminuyeron en un 17,4 %, debido principalmente a la caída en las ventas externas de ferroníquel (-56,4 %), plásticos en formas primarias (-29,9 %), aceites esenciales y resinoides y productos de perfumería (-22,3 %), papel cartón y artículos de pasta de papel (-29,3 %), productos medicinales y farmacéuticos (-23,6 %), maquinaria y equipo industrial en general en (-47,4 %) y materias y productos químicos (-14,6 %), con una contribución conjunta de -14,7 puntos porcentuales.

Así mismo, el comportamiento promedio de la utilización de la capacidad instalada en el 2015 ha sido uno de los más bajos desde principios de siglo, ubicándose por debajo del promedio histórico de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (EOIC), que publica la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia, Andi. El desempeño específico de este indicador hasta octubre de 2015 es de un 71,8%, y difícilmente alcanzará el mismo nivel de 2014 al cierre del año, que se ubicó en 76,5%.

No obstante, en los últimos meses, los indicadores del sector manufacturero empezaron a reaccionar favorablemente, mostrando un crecimiento promedio de 1,6%, según el Índice de Producción Industrial (sin trilla de café), que publica el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane. Este comportamiento positivo se explica principalmente por el buen desempeño de subsectores de: elaboración de bebidas, que presentó un crecimiento en su producción en comparación con 2014 de 2,9%, elaboración de alimentos de 8,3%, sustancias y productos químicos básicos, de 7,7%, y fabricación de productos minerales no metálicos de 4,7, los cuales sumados aportaron 1,1% al crecimiento de la producción industrial.

De igual modo, el sector productivo presentó un aumento en sus ventas en el mercado nacional, el cual se puede explicar, entre otros motivos, por el efecto de la alta devaluación del peso colombiano, que ha llevado a un proceso de sustitución de importaciones, donde los bienes que antes se importaban se están supliendo internamente. Esto se tradujo en uno de los promedios más destacables a nivel de pedidos, ubicándose por encima del nivel histórico de la EOIC. En promedio, el 89,7% de la producción manufactura califica los pedidos como altos o normales, un poco por encima de lo registrado en 2014, con 89,3%.

Es por esto que los expertos son optimistas frente a la forma en como el sector productivo cerrará el 2015, especulando un crecimiento del 0,1%, según afirma Fedesarrollo en su último informe sobre Perspectivas Económicas. Y aunque esta cifra parezca ínfima, es bastante alentadora frente a los números que presentan países de la Región como Brasil o Perú, donde sus industrias registraron caídas de -9,6% y -2.6%, respectivamente, además de las contracciones en Chile y Ecuador.

2016: Adiós a los saldos en rojo
No han sido escasos los titulares, unos menos ‘apocalípticos’ que otros, que advierten sobre lo complejo que será el 2016 en materia económica. Efectivamente, todos coinciden en que el país tendrá que hacer frente a diversas dificultades de orden interno y externo.

A nivel internacional, aun con la recuperación de la economía estadounidense, se prevé un bajo crecimiento mundial, en especial por la desaceleración progresiva en China, la cual cambiará el modelo de crecimiento basado en la inversión, para pasar a uno basado en el consumo, teniendo importantes consecuencias en los mercados emergentes, dado que el ‘Gigante Asiático’ es uno de los principales demandantes de materias primas en el mundo.

Por su parte, El Fondo Monetario Internacional en el World Economic Outlook (WEO) de octubre, proyecta para América Latina un crecimiento de 0,8% para el presente año, lo cual obedecería a una recuperación del precio del petróleo, a pesar de la difícil situación que afrontan las economías de Brasil, Argentina y Ecuador.

A nivel interno, la Andi, en su informe Colombia: Balance 2015 y Perspectivas 2016, considera que las mayores dificultades que tendrá que enfrentar la economía nacional serán el déficit en cuenta corriente, la situación fiscal y el impacto de los impuestos sobre la inversión y el crecimiento, a lo que se le suma la devaluación del peso colombiano, y la volatilidad de la tasa de cambio, factores que más preocupan a los industriales según la EOIC de octubre de 2015.

Y a pesar de lo pedregoso del escenario, industriales y analistas prevén para la industria nacional un crecimiento alrededor del 3.5% al 3,8%. No sería ninguna sorpresa, si usted, señor lector, en este momento se está preguntando, cómo, en medio de tantas alarmas, el sector productivo colombiano pasaría de un crecimiento casi nulo al mejor del último lustro. Al respecto, el Centro el Centro de Investigación Económica y Social, Fedesarrollo, presenta en su informe Perspectivas Económicas, tres razones para mantener tal optimismo.

La primera; la depreciación del tipo de cambio permitirá a la industria ganar competitividad, lo que se traduciría en un incremento en las exportaciones manufactureras, una vez se ajusten las estructuras productivas de las empresas nacionales.

La segunda; la puesta en marcha de la Refinería de Cartagena, la cual según estimaciones del Ministerio de Hacienda, en su máxima capacidad, podrá producir 165.000 barriles diarios y aportar hasta un 10% del PIB industrial y un 1,0% del PIB total del país, aunque sus efectos no se podrán apreciar sino hasta después del segundo semestre del año.

Finalmente, la depreciación del tipo de cambio obligaría a los importadores buscar a cómo suplir ciertos productos industriales que antes importaban con productos nacionales, un efecto de sustitución de importaciones que ya ha traído beneficios  al  sector desde finales de 2015.

Momento de reinventarse
Aunque en medio de los nubarrones la industria nacional parece gozar de buen sol, no son escasos los puntos en los que nuestro aparato productivo languidece, y tal vez sea éste el mejor momento para iniciar un cambio, o como lo denominado la Andi, una nueva industrialización.

Con este objetivo, esta agremiación le solicitó a Fedesarrollo realizar un diagnóstico sobre el rezago en el que se encuentra el sector manufacturero, y arrojo como principal conclusión, que la industria nacional debe tener como objetivo primordial, vincularse a las denominadas Cadenas Globales de Valor (CGV), dado el cambio de paradigma que sufrió la fabricación en los últimos años, pasando de productos fabricados en un país en específico a productos hechos en el mundo, o como se ha denominado este fenómeno, la desnacionalización de bienes y servicios.

Lo anterior, solo se conseguirá, según la Andi, por medio de una estrategia de largo plazo, con acciones que permitan convertir a Colombia en un eslabón importante de estas cadenas de forma eficiente y competitiva. Es por esta razón, que esta agremiación presentó recientemente su propuesta Estrategia para una industrialización en Colombia, un libro de siete capítulos donde se abordan temas como el costo país, pasando por la transferencia tecnológica e incluyendo el papel de los empresarios en la competitividad del país.

En este texto, de 314 propuestas, la Andi invita a los industriales en compañía del Gobierno Nacional a evaluar en qué cadenas productivas Colombia debe vincularse, para así desarrollar acciones estratégicas que le permitan ser un jugador importante en las mimas, y convertir esta meta en un propósito nacional y de largo plazo.

Esta invitación no solo ha tenido eco al interior del sector industrial, también en el Gobierno Nacional, quien en voz de Cecilia Álvarez Correa, ministra de comercio, industria y turismo, ha afirmado que las recomendaciones hechas por la Andi coinciden con las prioridades del Gobierno.

De esta forma, el Ministerio afirma ser consiente de la necesidad de impulsar la investigación y el desarrollo al interior de la industria, por eso se encuentra trabajando en los Conpes de ciencia, tecnología e innovación, que presentará a lo largo de este año, con los cuales busca producir cambios significativos en esta materia, con el fin de coordinar esfuerzos para alcanzar la meta que se ha trazado el Gobierno, convertir a Colombia en la tercera nación más innovadora de América Latina.

Paralelamente, en respuesta a la necesidad de cumplir con los estándares internacionales que nos permitan ser competitivos e ingresar a las CGV, además de aprovechar los acuerdos comerciales que se encuentran vigentes, el Ministerio se encuentra trabajando en la consolidación del Instituto de Metrología, la Organización Nacional de Acreditación de Colombia, y un sistema de laboratorios que permitan la certificación de productos colombianos.

Siendo así, aun son muchos los retos a los que se debe enfrentar la industria nacional, no solo en ciencia y tecnología, también en materia tributaria y de infraestructura, que permitan eliminar los cuellos de botella y las fallas de mercado que afectan la competividad del país, razón por la cual el Foro Económico Mundial nos ubica en el puesto 61 entre 140 economías, lo que significa que el 43% de los países que conforman esta lista presentan mejores condiciones. De no iniciar estos cambios, será muy difícil alcanzar la meta trazada por el Gobierno Nacional para 2018: exportar 30 mil millones de dólares en productos no minero-energéticos.

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Exportaciones manufactureras de Colombia crecen...

El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia, anunció, mediante comunicado de prensa, que las exportaciones del sector manufacturero completaron cinco meses consecutivos de crecimiento. De acuerdo con la entidad, en febrero, el comportamiento positivo de las exportaciones colombianas estuvo impulsado por las ventas externas del sector agropecuario y de alimentos (9 %) y de los combustibles (8,9 %). La ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Lorena Gutiérrez, manifestó su satisfacción por el resultado y explicó que la recuperación de la economía global incidió en el buen desempeño de las exportaciones colombianas. “El alza que muestran las exportaciones manufactureras es muy relevante. Esto es resultado de la política de diversificación de la oferta exportable en la que estamos empeñados y del trabajo de profundización y aprovechamiento de los acuerdos comerciales. Invito a los empresarios a seguir trabajando juntos en este proceso”, señaló la ministra Gutiérrez. El incremento de las ventas externas manufactureras en febrero estuvo impulsado por diferentes bienes. Productos como equipos de transporte (148,3%),  manufacturas de caucho (112,5%), abonos (97,6%), equipos y materiales fotográficos (93,1%), manufacturas de corcho y madera (89%), plásticos en formas primarias (78,5%), hierro y acero (51%), edificios prefabricados (46,5%), manufacturas de minerales no metálicos (46,3%) y productos medicinales y farmacéuticos (38,9%), entre otros, impulsaron esta clase de ventas. En cuanto al sector de las exportaciones agropecuarias y de alimentos se destacan productos como: pescado (155,9%), azúcares y preparados con azúcar y miel (111,7%), tabaco y sus productos (77,4%), aceites y grasas fijos de origen vegetal (71,6%), pienso para animales (50,7%), carne y preparados de carne (45,9%) y bebidas (42,5%), entre otros. Por otro lado, las exportaciones totales colombianas en el primer bimestre aumentaron 13,9 % al compararlas con igual periodo de 2017. Las manufactureras crecieron 20,5%, las agropecuarias y de alimentos 17,7% y las de combustibles 15,3% en los dos primeros meses del 2018. Argentina, con un incremento de 158%, Paraguay (133,2%), Canadá (135,4%), Austria (119,7%), Francia (83,4%), Corea del Sur (40,5%), Costa Rica (15,7%) y Estados Unidos (4,6%) son algunos de los socios comerciales a los que más crecieron las exportaciones colombianas en los dos primeros meses de este año.El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia, anunció, mediante comunicado de prensa, que las exportaciones del sector manufacturero completaron cinco meses consecutivos de crecimiento. De acuerdo con la entidad, en febrero, el comportamiento positivo de las exportaciones colombianas estuvo impulsado por las ventas externas del sector agropecuario y de alimentos (9 %) y de los combustibles (8,9 %). La ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Lorena Gutiérrez, manifestó su satisfacción por el resultado y explicó que la recuperación de la economía global incidió en el buen desempeño de las exportaciones colombianas. “El alza que muestran las exportaciones manufactureras es muy relevante. Esto es resultado de la política de diversificación de la oferta exportable en la que estamos empeñados y del trabajo de profundización y aprovechamiento de los acuerdos comerciales. Invito a los empresarios a seguir trabajando juntos en este proceso”, señaló la ministra Gutiérrez. El incremento de las ventas externas manufactureras en febrero estuvo impulsado por diferentes bienes. Productos como equipos de transporte (148,3%),  manufacturas de caucho (112,5%), abonos (97,6%), equipos y materiales fotográficos (93,1%), manufacturas de corcho y madera (89%), plásticos en formas primarias (78,5%), hierro y acero (51%), edificios prefabricados (46,5%), manufacturas de minerales no metálicos (46,3%) y productos medicinales y farmacéuticos (38,9%), entre otros, impulsaron esta clase de ventas. En cuanto al sector de las exportaciones agropecuarias y de alimentos se destacan productos como: pescado (155,9%), azúcares y preparados con azúcar y miel (111,7%), tabaco y sus productos (77,4%), aceites y grasas fijos de origen vegetal (71,6%), pienso para animales (50,7%), carne y preparados de carne (45,9%) y bebidas (42,5%), entre otros. Por otro lado, las exportaciones totales colombianas en el primer bimestre aumentaron 13,9 % al compararlas con igual periodo de 2017. Las manufactureras crecieron 20,5%, las agropecuarias y de alimentos 17,7% y las de combustibles 15,3% en los dos primeros meses del 2018. Argentina, con un incremento de 158%, Paraguay (133,2%), Canadá (135,4%), Austria (119,7%), Francia (83,4%), Corea del Sur (40,5%), Costa Rica (15,7%) y Estados Unidos (4,6%) son algunos de los socios comerciales a los que más crecieron las exportaciones colombianas en los dos primeros meses de este año.

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